Novak Djokovic ha vuelto, ya sin resentirse de su lesión en la pierna izquierda, el tenista serbio fue contundente este lunes para avanzar a los cuartos de final del Abierto de Australia 2023 ante la última esperanza local.
En poco más de dos horas, Novak no tuvo empacho en recetar 6-2, 6-1, 6-2 al australiano Álex de Miñaur que, pese al apoyo del público de la Rod Laver Arena, no pudo hacer nada contra el nueve veces ganador de este Grand Slam y quien se coloca como favorito de la competencia.
“Hace una semana, no pensaba en el título, solo pensaba en estar en condiciones para jugar el próximo partido. Hasta esta noche. Esta noche, de la forma que he jugado y me he sentido, me da motivos para creer que puedo ir hasta el final”, dijo en rueda de prensa.
Tras tres partidos con complicaciones por las molestias de la lesión muscular en su pierna izquierda, esta vez Djokovic fue letal y se colocó por decimotercera vez en cuartos de final de Melbourne, donde espera el ruso Andrey Rublev.
Con una racha de cuatro juegos seguidos y apenas cuatro puntos en contra, el serbio cerró el primer set y continuó el atropello en el segundo, en el que un buen saque directo de De Miñaur en el sexto juego evitó el aplastante dominio del serbio.
“Si este es el nivel, creo que se va a llevar definitivamente el título”, dijo De Miñaur, quien dijo haberse encontrado con “un Novak muy cerca de su mejor versión”.
“He jugado el mejor partido de este año hasta ahora”, dijo Djokovic todavía en la pista.
“Cuando mi cabeza está liberada, esto es lo que ocurre”, indicó en rueda de prensa.
Es así que en la siguiente ronda se medirá a Rublev que, incluso antes de conocer su oponente, reconocía que “nadie quiere enfrentarse a Novak”.